Por lo general, la mayoría de la gente tiene problemas para descansar bien durante la temporada de verano y, sobre todo, cuando el calor se vuelve abrasador. Dicho esto, también es cierto que con la llegada del invierno, el frío, los días más cortos y los cambios en nuestros ritmos también pueden afectar negativamente al sueño.
Si tiene problemas para conciliar el sueño o descansar bien en invierno, no se preocupe: existen estrategias sencillas y eficaces que le ayudarán a recuperar un sueño de calidad. En este artículo, exploramoscinco formas de equilibrar el sueño durante los meses de invierno.
Una rutina nocturna diaria adecuada es esencial para indicar al cuerpo que es hora de relajarse. Dedica 30-60 minutos antes de acostarte a prácticas que te ayuden a desconectar:
● Bebe una infusión caliente: la manzanilla, la valeriana o la melisa son buenas opciones para favorecer la relajación.
● Lee un libro: elige una lectura ligera o amena para quitarte el estrés del día.
● Evita las pantallas: la luz azul de smartphones, tablets y televisores interfiere en la producción de la hormona del sueño, la melatonina.
● Aproveche las técnicas de relajación: dedique tiempo a técnicas de relajación para calmar la mente y el cuerpo, como la meditación guiada, los estiramientos nocturnos y los aceites esenciales en el baño.Estos hábitos crearán un ambiente propicio para el descanso y le ayudarán a despejar su mente de las preocupaciones diarias, ayudándole a descansar mejor por la noche.
El frío del invierno puede dificultar la relajación, pero una habitación demasiado cálida o demasiado fría nunca es ideal para dormir bien.
La temperatura recomendada para dormir bien, incluso en invierno, es de entre 16 y 20 grados centígrados. He aquí cómo optimizarla durante las estaciones más frías:
● Utiliza mantas en capas: te permitirán regular el calor sin sobrecalentarte.
● Evita las corrientes de aire: asegúrate de que puertas y ventanas están bien aisladas.
● Prueba la calefacción localizada: ¡una bolsa de agua caliente o una manta calentadora pueden ser grandes aliadas en las noches frías!
Durante el invierno, los días más cortos y la menor exposición a la luz solar pueden alterar el ritmo circadiano, es decir, nuestro reloj biológico interno.
Para contrarrestar este efecto, hay algunos hábitos que puedes empezar a adoptar:
● Pasa más tiempo al aire libre: incluso un breve paseo de 20-30 minutos cada día puede marcar la diferencia.
● Utiliza una lámpara de luz natural: si vives en una zona con pocas horas de sol, plantéate comprar una lámpara de fototerapia.
● Siéntese cerca de una ventana: aproveche la luz natural todo lo posible mientras trabaja o se relaja.
Lo que comemos y bebemos por la noche puede afectar a la calidad de nuestro sueño. Durante el invierno, privilegia los alimentos que favorecen la relajación y mantén algunas reglas:
● Evita las comidas copiosas por la noche: una digestión difícil y los alimentos grasos o picantes pueden perturbar el sueño.
● Limita la cafeína: reduce el consumo de café, té y chocolate por la tarde y por la noche.
● Suplementa los alimentos ricos en triptófano: este aminoácido favorece la producción de serotonina y melatonina. Puedes encontrarlo en alimentos como el pavo, los lácteos, los plátanos y los frutos secos.
Descubra nuestra gama de productos para el sueño: colchones, almohadas y accesorios diseñados para garantizarle noches tranquilas, ¡incluso durante los meses más fríos!
¿Desea un asesoramiento personalizado? Póngase en contacto con nosotros: ¡estaremos encantados de ayudarle a elegir el artículo más acorde con sus necesidades!