La producción de colchones de calidad es un arte que se aprende con dedicación, concentración y innovación.
Por esto Mollyflex, fábrica de colchones desde el 1980, a lo largo de los años, ha implementado su fabricación vigilando sobre el estudio y el uso de materiales específicos y tejidos del más alto nivel, implementando la investigación científica y tecnológica para encontrar soluciones innovadoras que deben aplicarse a la fabricación de sus colchones. En el interior del centro de producción de Manerbio (Brescia) se fabrican, de hecho, todos los diferentes tipos de colchones Mollyflex y ComfortStyle, mediante procedimientos automatizados que mantienen, sin embargo, la fabricación artesanal característica de los colchones. Porque, si es cierto que la fábrica de colchones ha crecido y se ha expandido, llegando a ocupar una superficie de más de 7000sqm y garantizando una producción diaria de más de 1.000 colchones, lo que no ha cambiado es el amor por la calidad del producto que, por el contrario, ha sido mejorada gracias al desarrollo tecnológico y el uso de nuevos materiales que han dado un nuevo impulso al sector profesional.